Time, Kim ki-Duk
A continuació us detallo informació sobre l'última pel·lícula de Kim Ki-Duk.
SINOPSIS

Como se hizo
TIME, la nueva película de Kim Ki-duk, es la decimotercera que dirige, y llega tras una pausa de un año respecto a su título anterior, El arco. Dado que Kim es conocido por ser prolífico y cuidadoso, el año (en su caso, mucho tiempo) transcurrido ha aumentado la curiosidad y las expectativas hacia su siguiente trabajo. En esta nueva película, Kim Ki-duk se pregunta acerca de las bases fundamentales del amor y de la naturaleza humana. En efecto, el director afronta las dudas y la angustia de una mujer, unidas al amor que siente por su compañero y que la llevan a preguntarle si se amarán toda la vida y si con el paso del tiempo no se cansará de verla. TIME describe con delicadeza la relación que existe entre el tiempo y las relaciones humanas, y los cambios que se producen en la relación misma.
Para explorar el conflicto humano ocasionado por el paso del tiempo, la protagonista femenina recurre a un método decididamente radical: cambiar su rostro y su cuerpo para que el hombre que adora la siga amando. Así, el director retoma el asunto de las relaciones humanas, que ya ha afrontado con curiosidad e interés en otras ocasiones, para abordarlo desde un punto de vista muy original.
Esta película tiene más diálogos y personajes que sus obras anteriores. Además, el director se pone a prueba rodando algunas escenas de masas, con el objetivo de plantear diversas preguntas sobre la naturaleza humana examinando a personajes muy distintos.
Para explorar el conflicto humano ocasionado por el paso del tiempo, la protagonista femenina recurre a un método decididamente radical: cambiar su rostro y su cuerpo para que el hombre que adora la siga amando. Así, el director retoma el asunto de las relaciones humanas, que ya ha afrontado con curiosidad e interés en otras ocasiones, para abordarlo desde un punto de vista muy original.
Esta película tiene más diálogos y personajes que sus obras anteriores. Además, el director se pone a prueba rodando algunas escenas de masas, con el objetivo de plantear diversas preguntas sobre la naturaleza humana examinando a personajes muy distintos.
Sung Hyun-ah (Woman is the Future of Man) interpreta el papel de Seh-hee, el personaje principal, en un continuo cambio. Para el papel de Ji-woo, Kim Ki-duk eligió a Ha Jung-woo, que ha adquirido notoriedad mundial en 2005 por la película The Unforgiven, dirigida por Jong-bin Yun.
Para la financiación de TIME, Kim Ki-duk ha vuelto a trabajar con la japonesa Happinet Pictures, que empezó a colaborar con el director coreano en 2004, en la producción de las películas Hierro 3 y El arco.
El lugar en el que Ji-woo ve a una mujer misteriosa con una máscara y luego a See-hee es el parque de las esculturas de Baemigumi. El nombre procede del término que, en la jerga de los pescadores, indica la proa de un barco, a la que recuerda precisamente la forma del parque, situado en la isla de Mo, junto a la ciudad aeroportuaria de Inchon, a unos 40 kilómetros al oeste de la capital, Seúl. Desde el puerto de Sam-mok de Inchon y tras sólo diez o quince minutos en barco se puede llegar a la isla donde se encuentra el parque, propiedad del escultor Lee Il-ho, que vive, trabaja y expone sus obras en este lugar tan especial. Un gran monumento de granito llamado La isla de Mo y Lee Il-ho acoge a los visitantes. A continuación, una serie de unas treinta piezas originales de Lee se extiende por la playa. Las esculturas simbolizan el amor, el erotismo, el dolor y la metempsícosis, temas recurrentes en la obra de Lee, nacido en 1946 y marcado por una infancia solitaria y llena de dificultades. A partir de 1983, cuando obtuvo el gran premio de un concurso convocado por el popular diario Joong Ang Daily, empezó a dedicarse más en serio a su carrera artística, hasta que logró alcanzar su sueño: ser un artista en armonía con la naturaleza, precisamente en esta isla. En efecto, no le gustan ni la frenética vida de la ciudad ni la tecnología avanzada porque teme que puedan perjudicar al espíritu y a los instintos más puros del ser humano. El año pasado, Lee hizo una exposición privada en Seúl titulada "En nuestra vida anterior fuimos peces".
La isla de Mo es muy pequeña, con una superficie de menos de un kilómetro cuadrado, y en ella viven sólo cincuenta personas. Estuvo desierta hasta finales del siglo XIX, cuando un pescador de la costa decidió instalarse allí. La isla y la playa se convirtieron en una popular atracción turística desde que se rodaron en ella dos series de televisión de gran éxito en los países asiáticos.
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